Académicos/as exploran el uso de la realidad aumentada para los procesos de formación en educación superior

La instancia organizada por la UMD permitió que académicos/as de la ULS tuvieran el espacio para dialogar respecto a las oportunidades y desafíos de esta tecnología.

Enriquecer un entorno, observar de forma segura y mostrar en detalle elementos que a simple vista no podemos apreciar, fueron solo algunas de las ventajas de las que se habló durante la segunda instancia que compone el ciclo de charlas “Conversemos sobre”, que en esta oportunidad trató sobre la realidad aumentada como una tecnología inmersiva para apoyar procesos de aprendizaje.

La instancia organizada por la Unidad de Mejoramiento Docente (UMD) permitió que académicos/as de la Universidad de La Serena tuvieran el espacio para dialogar respecto a las oportunidades y desafíos de esta tecnología, la cual permite promover aprendizaje a través del acceso a otros modos de representar contenidos, según lo expuesto por el Mg. Francisco López Cortés, Académico del Departamento de Biología, junto al Dr. Ricardo Zamarreño Bastías, Académico del Departamento de Química, quienes abrieron la charla exponiendo sus experiencias en torno a la incorporación de las TICS en la institución.

En la charla realizada vía Zoom, docentes de la universidad experimentaron el uso de la realidad aumentada y la valoraron como un recurso que permite que el/la estudiante tenga una mayor comprensión respecto a elementos que son intangibles y en algunos casos abstractos, además de ser útil para incentivar el aprendizaje autónomo.

Al respecto, el Mg. Francisco López, Director Ejecutivo Laboratorio de Investigación e Innovación Tecnológica para la Educación en Ciencias (LIITEC ULS), destacó la importancia de fortalecer a los/as docentes en el uso de las tecnologías: “Es importante incentivar a los/as académicos/as con actividades permanentes, mostrando casos exitosos de uso y buenas prácticas. La universidad ya sistematiza buenas prácticas, pero podría tener más de estas actividades en las que se da a conocer al otro que es posible, como en esta oportunidad que vieron algo que no conocían y pensaron que serviría para lo que hacen”.

Además, agregó que sería positivo que la institución pueda fortalecer a los grupos que están emergiendo con tecnologías, mientras que sistematizan y socializan las buenas prácticas: “Hay que consultar por las tecnologías adecuadas y vincularse con las otras iniciativas de innovación de la institución para que estas buenas prácticas sean difundidas y así estimular a que los profesores a utilizarlas.”