Académicos/as, funcionarios/as y estudiantes revisaron los objetivos de la política inclusiva y abordaron temas como igualdad y formación, espacios seguros, conciliación, acceso universal y participación. 

La Universidad de La Serena dio continuidad al trabajo de la primera mesa triestamental realizada en abril, que tiene por objetivo realizar una propuesta de la política de Inclusión para la entidad, cuyo objetivo es impulsar un cambio cultural basado en la diversidad, equidad e inclusión, buscando garantizar la accesibilidad y participación plena de todas las personas en los procesos académicos, administrativos, investigativos, de vinculación con el entorno y extensión de la Universidad, promoviendo así el respeto y valoración de las diferencias.

En esta oportunidad, académicos/as, estudiantes y funcionarios/as revisaron los objetivos de la política inclusiva y abordaron temas como igualdad y formación, espacios seguros, conciliación, acceso universal y participación. A partir de esta revisión enmarcada en el Proyecto de Fortalecimiento Institucional ULS-22991 del Ministerio de Educación, surgieron acciones para que sean evaluadas y consideradas en la elaboración de la propuesta final de la normativa.

Según el Coordinador de AGDDFI, Cristian Blanco, área responsable de materializar la política, la elaboración de ésta en forma triestamental “es un anhelo que hemos venido trabajando hace bastante tiempo. Como institución estamos conscientes que es un asunto importante, sobre todo en materias de acreditación y estamos enfocando todos nuestros esfuerzos para que contemos con ella”.

Por otro lado, el estudiante de segundo año de Ingeniería Comercial, Rodrigo Aguilera, señala que estas instancias son muy interesantes porque demuestran que la Universidad está trabajando en cómo incluir a todos sus integrantes, y lograr que nadie se sienta marginado, por así decirlo”. Además agregó que “nosotros los estudiantes venimos de contextos diversos, por ejemplo, hay estudiantes con discapacidad o de diversidad sexual, y cada uno es una realidad aparte. Para ellos es muy importante no sentirse discriminado y poder desarrollarse como futuros profesionales en un ambiente de confianza y seguro”.

En adición, la coordinadora del Departamento de Bienestar Estudiantil, Patricia Astroza, valora la posibilidad de participar en una mesa triestamental, “es una gran oportunidad porque, en mi caso, como coordinadora de esta unidad de la DGAE, nos permite incorporar esta mirada que tiene que ver con los estudiantes en los servicios de apoyo que les brindamos, con el fin mejorar su calidad de vida universitaria, ya sea dentro de las aulas, durante su formación y desarrollo integral”. Asimismo, recalcó en la necesidad de considerar que cada uno de los integrantes de la comunidad universitaria es distinto al otro y “son todas nuestras diferencias que precisamente enriquecen el trabajo diario y que aportan no solamente a desarrollarnos, y en el caso de los estudiantes, como profesionales, a cumplir la meta y los sueños que tienen”.