Los equipos de trabajo de AGDDFI, OAME, DGAE, UGIP, OSE y UMD compartieron experiencias vinculadas al quehacer propio de las unidades focalizadas en la optimización y mejora de procesos formativos.

Socializar buenas prácticas identificadas en visitas de diferentes unidades de la Universidad de La Serena a 12 casas de estudios del país, fue el principal objetivo de una jornada que reunió a los equipos de trabajo del Proyecto de Fortalecimiento Institucional ULS23992 “Transitar hacia un Modelo Sistémico Integrado (MSI) de la Trayectoria Formativa en la ULS", que apunta a generar un trabajo transversal de unidades para mejorar los indicadores de progresión académica de l@s estudiantes USerena, fortaleciendo su trayectoria formativa (retención y titulación oportuna).

En el encuentro, profesionales de AGDDFI, OAME, DGAE, UGIP, OSE y UMD -unidades que forman parte del proyecto-, compartieron aquellas prácticas vinculadas al quehacer propio de las áreas focalizadas en la optimización y mejora de procesos formativos, así como también identificaron aquellas que aportan o tributan directamente al desarrollo y objetivos de la iniciativa desarrollada por ULS.

La Vicerrectora Académica, Dra. Alejandra Torrejón, destacó que es muy relevante que “se puedan conocer experiencias de lo que acontece en estos ámbitos en las distintas instituciones de educación superior a nivel nacional. Es una instancia enriquecedora que nos permite valorar aquello que poseemos, pero también aprender de las experiencias de otras universidades en temas que se refieren a todos los procesos incumbentes en la trayectoria formativa, que vienen desde el acceso, monitoreo, acompañamiento, hasta el egreso”.

La autoridad agregó que “esta socialización permite que nuestro Modelo Sistémico, al cual estamos apuntando, sea lo más robusto, para que de esa manera podamos ir generando procesos institucionales en temas formativos muy sólidos, y que además los resultados de indicadores académicos sean potentes”.

Para el Director de Docencia, Jaime Rodríguez, la socialización de experiencias de otras universidades enriquecen a la Universidad y detalló las etapas que están trabajando: “Lo es detectar las buenas prácticas de distintas casas de estudio. Por ejemplo, qué hacen en materia de acompañamiento estudiantil, qué hacen para detectar a sus estudiantes en riesgo, qué hacen a través de sus áreas de inclusión, etc. para luego revisar estas buenas prácticas y ver el modo de integrarlas al modelo de nuestra institución, además de realizar un diagnóstico interno, de cada unidad, para poder abastecer al modelo que se buscará instaurar”.

Buenas prácticas

El Coordinador de Formación Integral AGDDFI, Mg. Cristian Blanco, señaló que “si bien nosotros tenemos buenas prácticas en la temática de inclusión, siempre hay universidades, al igual que nosotros, que poseen prácticas novedosas, las que fue importante conocer y ver la posibilidad de implementarlas en la institución, adaptadas a nuestras necesidades. En USACH conocimos los ajustes razonables temporales, que son aquellos mecanismos de acción que se llevan a cabo para nuestros estudiantes con discapacidad, pero que no alteran el currículum de los alumnos, sino que vienen a equilibrar los procesos formativos. En nuestro caso, los ajustes razonables son permanentes, pero en aquella universidad son temporales, lo que es sumamente interesantes porque se hacen en función de ciertos hechos específicos, por ejemplo, el fallecimiento de algún familiar o una situación de salud mental, que son ajustes razonables si es un curso de acción que no altera el currículum pedagógico, pero que significan una ayuda importante para los estudiantes”.

En tanto, la jefa de Unidad de Mejoramiento Docente (UMD), Dra. Pamela Labra, valoró una de las experiencias compartidas en las cuatro instituciones que visitaron y que “se relacionan con las distintas acciones y actividades que llevan adelante unidades como la nuestra, que están específicamente articuladas con las políticas institucionales, por ejemplo, el requerimiento que un docente curse el Diplomado en Educación Superior es un requisito transversal y es parte de la política de contratación de la institución o que un gestor cultural se capacite y fortalezca sus competencias de gestión también tiene que ver con un requerimiento asociado a la política, desde el contrato o la evaluación”.