
Las remozadas dependencias contribuyen al quehacer del cuerpo docente y a la atención de los estudiantes, además de ser un importante aporte para el proceso de acreditación de la carrera.
Con la presencia de autoridades universitarias, directivos y académicos, se llevó a cabo la entrega de las obras de reparación y mejoramiento de las oficinas del Departamento y Escuela de Arquitectura de la Universidad de La Serena, ubicadas en el Campus Enrique Molina Garmendia, y que forman parte del plan impulsado por Rectoría para mejorar las dependencias de la carrera que se vieron dañadas tras la inundación del recinto, producto de la intensa lluvia ocurrida en 2014 y que afectó a todo el sector aledaño a la Ruta 5 Norte intersección Av. Amunátegui.
Tal como señaló el director de Servicios de la ULS, Marcos Sepúlveda, esta obra cuyo monto alcanzó aproximadamente $55 millones se suma a la remodelación de los talleres de Arquitectura y recintos utilizados por los estudiantes realizada en años anteriores, algunos de ellos implementados con modernos equipos computacionales.
El profesional detalló que el mejoramiento contempló una intervención de una superficie de 390 m2 y consistió en el tratamiento de muros con productos contra la humedad. También se pintaron murallas y cielos de todas las oficinas, baños y cocina, hall y fachada exterior que se relacionaba con la remodelación. Se contempló además la nivelación de la superficie interior, para recibir nuevo pavimento de porcelanato, siguiendo las líneas de diseño establecidas por el Departamento de Arquitectura. También se recuperaron y repararon las maderas de puertas y ventas, se remodelaron tres baños y cocina.
A la vez, se construyó nueva red eléctrica, y se incorporó equipos de iluminación led que ayudará al ahorro de energía y la luminosidad del recinto.
El director del Departamento de Arquitectura, Eric Troncoso, agradeció al Rector, Dr. Nibaldo Avilés, y a las autoridades el apoyo entregado para la concreción de estas obras, destacando que se tratan de remozadas dependencias y espacios dignos que contribuyen al quehacer del cuerpo docente y a la atención de los estudiantes, además de ser un importante aporte para el próximo proceso de acreditación de la carrera.
En tanto, el decano de la Facultad de Ingeniería, Dr. Mario Durán, sostuvo que este renovado espacio es fundamental para la acreditación del programa de pregrado adscrito a la macrounidad y para que la carrera de Arquitectura “siga creciendo y dando prestigio a la Universidad y la Región de Coquimbo”.
En la entrega de las obras estuvieron presentes el vicerrector académico, Dr. Jorge Catalán, la vicerrectora de Asuntos Económicos y Administrativos, Dra. Marcela Aguirre, la directora de Docencia, Mg. Laura Vega, el decano de la Facultad de Ingeniería, Dr. Mario Durán, el director del Depto. de Arquitectura, Eric Troncoso, el director de la Escuela de Arquitectura, Mg. Nelson Sepúlveda, el director de Servicios, Marcos Sepúlveda, académicos y funcionarios de la institución, quienes realizaron un recorrido por estas remozadas dependencias que en los próximos meses contarán con nuevo equipamiento.


Con un estilo ágil y didáctico, el Dr. Gilberto Aranda dictó la conferencia “Radicalismos islámicos: la emergencia de ISIS”, donde revisó el contexto histórico, político y religioso que cimenta la aparición de grupos radicales que hoy marcan presencia importante en la agenda noticiosa mundial. “La idea fue presentar algunas señas culturales del mundo islámico y desde ahí pasar a cómo una civilización, en un momento de decadencia, va a tener sus vástagos más violentos en Al Qaeda y particularmente la violencia de ISIS”, señaló el académico.
Durante la tarde llevó a cabo la segunda conferencia titulada “Liderazgos Nacionales y Proyectos Regionales: MERCOSUR, ALBA, ALIANZA PACÍFICO”, en la que el expositor abordó la historia de algunos países latinoamericanos, profundizando en los motivos por los cuales estos llegaron a formar estas alianzas de empoderamiento entre ellos.
En el seguimiento, los profesionales observaron la presencia de ondas U.L.F. “durante la fase principal y de recuperación de la tormenta geomagnética, las cuales son cuestionadas en bajas latitudes por la teoría de la resonancia de la línea de campo, Southwood, D. J. (1974)” y que durante esta tormenta magnética, para la estación de La Serena, se observa una mayor intensidad de las ondas U.L.F. Pc5 en la fase principal, lo cual no concuerda en general con lo observado en altas latitudes, donde las intensidades más altas son observadas durante la fase de recuperación. “La presencia de pulsaciones magnéticas del tipo Pc5 en bajas latitudes, con la intensidad de potencia creciendo hacia el ecuador magnético, fue corroborada anteriormente por Julio Marín et al., (2014)”, explicaron.
“Es bueno crear vínculos con personas que pronto estarán en el mundo público y que se interesen por estos temas y que, por sobre todo, nos ayuden a difundir a Gabriela en toda su dimensión, para que todos tengan acceso a una Gabriela distinta, en especial el público común y corriente y no sólo los intelectuales”, señaló respecto a la visita de los estudiantes Rodrigo Iribarren, director del Museo.
